Viajar es vivir
- mariadelacruzg
- 24 oct 2014
- 2 Min. de lectura
Hace ya un tiempo que me cuesta increíblemente contestar a la pregunta “¿de dónde eres?” Literal y llanamente, soy María, nacida en España. Y dos años atrás, me presentaba así. Pero hoy, hacerlo me parece una especie de traición a lo que soy: una nómada incansable, ávida de nuevas experiencias.

Compartir un trecho del camino con gente de tan diversas procedencias como con la que he convivido, ha abierto mi mundo y me ha hecho madurar mucho en poco tiempo. Por decisión propia, dejé mi país hace más de dos años, aprovechando cualquier beca y oportunidad que me permitiese crecer como persona. Porque (y no dudo ni un ápice al decirlo) viajando se aprende a vivir. Y el mundo es la mejor escuela.

¿Qué nos impulsa a movernos? ¿Qué me llevó a abandonar la perspectiva de una vida cómoda y rutinaria en casa, cerca de mi familia, para lanzarme a la aventura? La idea de que la vida es demasiado corta como para pasarla en un único lugar. Hay almas que necesitan descubrir nuevos horizontes, cambiar de destino cada cierto tiempo. En caso contrario, terminan marchitándose.

Cuando era pequeña y veía caminando por las calles de mi ciudad a mochileros desgreñados, sucios, guardando celosamente sus escasas pertenencias, me despertaban curiosidad. Ya por entonces soñaba con vivir en la mayor cantidad de lugares posibles, y cuando me preguntaban qué quería ser de mayor, no respondía lo típico, que veterinaria, profesora o astronauta. Yo contestaba que quería ser exploradora.

En este blog, pretendo haceros partícipes de algunas de mis aventuras por el mundo. No hace mucho que di rienda suelta a mi alma de nómada, pero espero que a partir de ahora me acompañéis en mis viajes y nuevas experiencias. No quiero que esto se limite a ser un blog de viajes, sino que en él encontraréis todo tipo de inspiraciones y alimentos para el alma.
¿Venís conmigo?
María
Comments